A partir del 2 de mayo volvió nuestra libertad para entrenar. La entrenadora nos advirtió de que debÃamos acostumbrarnos de nuevo a correr y que los entrenamientos serÃan progresivos. El primer dÃa debÃamos andar 20 minutos como calentamiento y luego correr 8 minutos solamente. Cuando salà de casa no sabÃa cómo iba a contenerme porque tenÃa ganas de correr hasta caer redonda. A partir de ese dÃa fuimos intercalando dÃas de carrera con dÃas de ejercicio aeróbico alternativo y fuerza. Comprender que a veces menos es más ha sido importante en la vuelta, seguir las instrucciones era esencial para evitar lesiones. Este ejercicio de adaptación para sintonizar el cuerpo a la nueva realidad ha sido algo extraño. Ahora ya estamos más cerca del atletismo de antes, pero debemos tener en mente que es más importante mantenernos sanos que machacarnos. Además, de todo podemos sacar un lado positivo y hemos ganado disfrute en este deporte por no tener objetivos que cumplir, sino muchas ganas de seguir corriendo.
- Carmen Carrión