Nunca me habÃa puesto a dibujar porque ni se me daba bien ni me agradaba, pero esta cuarentena me ha servido para descubrir que quizás me gusta más de lo que pensaba. Muchos dÃas para desconectar me ponÃa música y pintaba. He descubierto que dibujar es otra forma de dejar fluir lo que llevamos dentro: estrés, euforia, energÃa, etc. Debemos valorar más el arte en general; y ya no solo admirar las creaciones de otros, sino crear nosotros mismos. Para mà es como una terapia y una forma de conocerme. No hace falta calidad técnica solo disfrutarlo de verdad. Me alegro de que el tiempo "muerto" que ha supuesto este parón de la vida normal me haya hecho descubrir nuevas actividades.
- Carmen Carrión